La independencia se ha posicionado como un ideal al que aspiramos socialmente, en tanto está asociada al crecimiento personal y la autorrealización. Sin embargo, tendemos a polarizar la independencia y la dependencia, subestimando la importancia del trabajo de sostener la vida y negando nuestra vulnerabilidad vital.

¿Qué sucede cuando desafiamos esta dicotomía y exploramos la interdependencia como una fuerza que sostiene nuestras relaciones?

Recientemente, una querida amiga me escribió para compartirme que su padre está gravemente enfermo en el hospital. Yo quiero mucho a su papá y nuestras familias se conocen; hemos compartido tanto celebraciones como pérdidas. Nuestra vulnerabilidad va cambiando a lo largo del ciclo de vida, modulando la intensidad y la frecuencia con la que brindamos y recibimos cuidados; en ciertos momentos, convoca a reunirnos y sostenernos mutuamente ante la incertidumbre.

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La interdependencia es un concepto que abreva de la literatura feminista y es el ethos de los cuidados. Alude a formas de cuidarnos en colectivo promoviendo el bienestar común y la autonomía en nuestros vínculos. Por ello, cuestiona de fondo las desigualdades de género reproducidas desde una noción individualista y androcéntrica de la independencia.

Desigualdades de género y autonomía

La idealización de la independencia en nuestra sociedad tiene múltiples facetas, todas ellas arraigadas en la exaltación de la libertad y la realización individual. Esta visión no contempla la complejidad de nuestras relaciones interpersonales ni reconoce las desigualdades interseccionales que subyacen en ellas; asimismo, apuntala el modelo de acumulación capitalista basado en la libertad de consumo. Es necesario problematizar el marco en el que se aspira a una independencia desvinculada de su contexto vital.

Simone de Beauvoir, en El segundo sexo, destacó cómo la autorrealización está permeada por desigualdades de género, donde las mujeres se ven obligadas a renunciar a su proyecto social para cumplir con un destino biológico impuesto.El énfasis que pone en denunciar las condiciones de opresión de las mujeres como una experiencia compartida subraya su interés por priorizar el reconocimiento y la reciprocidad en los vínculos en la construcción de un proyecto emancipatorio.

Así, su análisis no apunta a una llana recuperación femenina de la libertad masculinizada por sujetos que viven para sí, sino a transformar la situación que posiciona a las mujeres como un ser para otros. 

La crítica a la dicotomía de independencia-dependencia es ampliada por la física historiadora Evelyn Fox Keller, quien cuestiona la autonomía entendida como una independencia radical. Esta autora propone una autonomía dinámica que reconoce y enfatiza nuestra interconexión con otras personas. Su perspectiva desafía los principios del capitalismo liberal que entienden a la autonomía como una minimización de las coacciones y una maximización de la capacidad de elección, mientras subraya el respeto por la autonomía de otra persona.

Partir de nuestra interconexión y del reconocimiento mutuo facilita pensar el cuidado de la vida desde una lógica interdependiente y recíproca. Al adoptar la interdependencia:

  • Reconocemos y valoramos nuestra vulnerabilidad constitutiva

  • Redefinimos la relación entre autonomía y cuidados

  • Promovemos una cultura del cuidado mutuo, el autocuidado y la corresponsabilidad

  • Fortalecemos los lazos comunitarios que ponen la vida al centro

Luchar por redistribuir y revalorizar el trabajo de cuidados demanda superar los estereotipos de género prevalentes y, con base en ello, reformular nuestra autonomía. ¿Cómo opera la interdependencia en tus relaciones personales, familiares y comunitarias? ¿Puedes identificar desigualdades en ellas? ¿Qué acciones concretas puedes tomar para redistribuir el trabajo de cuidados y promover la corresponsabilidad?

Al comprometernos activamente con estos principios, podemos contribuir significativamente a la construcción de una sociedad más justa y solidaria desde la reciprocidad en los cuidados.

*Referencias:

Beauvoir, Simone de. El segundo sexo. Madrid: Cátedra, 1999.

Keller, Evelyn Fox. Reflexiones sobre género y ciencia. Madrid: Cátedra, 1991.